Desde pequeños, mostramos nuestras preferencias de forma cristalina, y somos capaces de pasar por lo que haga falta. Este joven que vemos en las calles de Bilbao, sufriendo el estruendoso paso del monoplaza de Robert Kubica, pero sin despegarse del muro.

He visto La Luz

En el faro del cabo de Gata, se puede observar que cuenta con uno de los atardeceres mas espectaculares que jamás he visto, es indescriptible la sensación que embriaga tus sentidos al adquirir conciencia de lo que se esta viviendo. Es un lugar de muy difícil acceso, pero el esfuerzo de llegar hasta allí, se ve recompensado con creces al poder ver estó.





Pero estate atento, no sea, que por ver el sol te pierdas la sombra.

Playa de Monsul - Mi ultima cruzada

Recordando esa escena en la que Sean Connery, armado con su paraguas, derriba un pequeño caza de hélices Nazi a fuerza de gaviota. Y buscando esa sombra, tan cotizada en el verano Almeriense, quede sobrecogido por la violenta belleza que aporta un mar ligeramente encrespado.

Guggenheim Bilbao (Así lo vi yo)

En pleno Bilbao y con el atronador sonido de una veintena de monoplazas, en su rápido discurrir por las calles de Bilbo. Tuve el privilegio de poder contemplar algo, que me marco por su efímera belleza. Un paso, o el paso de un minuto, cambian por completo la fisonomía de este singular museo, cada minuto surge o muere un brillo en su brillante fachada.